Alimentarnos es un pilar de nuestra vida. Si estamos sometidos a un régimen duro de entrenamiento, la importancia de la dieta es todavía mayor ya que las necesidades del organismo se multiplican.
Quemando 6500 kcal en un día… no pensasteis, ¿qué come este tío?
Nada del otro mundo, pero cada vez mejor organizado.
La verdad es que nunca le he dado mucha importancia al comer una cosa u otra. Ya que nunca he tenido problemas con el peso, por otro lado, es fácil de entender que no los tenga.
Desde finales de la temporada pasada y desde el inicio de esta he ido introduciendo productos naturales y ecológicos en mi dieta habitual, reconfigurando poco a poco el orden de las comidas. Todo ello gracias a un compañero de profesión y parte de mi equipo de confianza, que muy pronto os presentaré.
Os cuento unas cuantas claves de lo que estoy utilizando en estos momentos:
- Eliminar lácteos. Uno, por mi sinusitis crónica y dos, por mala asimilación en el cuerpo. Ahora tomo leche de arroz ecológica.
- La fruta, antes de las comidas. Con el estómago vacío y sin beber agua (gases). Y después de comer sólo piña, manzana o papaya.
- Eliminé sal y azúcares.
- Incorporé productos como el polen ecológico. Un alimento muy completo que fortalece el sistema inmunitario y es fuente de proteínas.
- La pasta, de cereales como el Kamut y la Espelta, integrales y sin refinar. Al contrario que la pasta del supermercado.
- Siempre el doble de verduras que del plato principal.
- Especio con cúrcuma la comida y al sumar la pimienta se multiplica su absorción por el cuerpo y su efecto antinflamatorio.
- Aprovecho el momento de hacer la comida para tomar un caldito, fuente de minerales y además prepara el estómago para la digestión.
Gracias a estos pequeños hábitos he conseguido:
- No tener ningún tipo de bajón fisiológico después de comer.Y mayor energía durante todo el día
- Digestiones muchísimo más rápidas. Como a las 13:00 y a las 15:30 entreno sin problema ninguno.
- Recuperar mejor de los entrenamientos.
- Potenciar mi rendimiento diario.
Otra cosa fundamental en el ahorro de tiempo es la planificación de las comidas de la semana, siendo mucho más fácil comprar exactamente lo que necesitas y ahorrar dinero, aquí os lo dejaré en el twitter mañana.
Estad atentos y recordad: si queremos rendir a buen nivel, como diría Songoku, antes do barullo hai que encher ben o bandullo.
Grande!!! 😉
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